La situación no era todo lo ideal para Juanjo de lo
que él habría esperado. El encuentro con su suegro en urgencias no entraba
dentro de sus planes, de hecho, ni la visita a urgencias entraba. Pero se había
producido y tenía la extraña sensación de que estaba bajo sospecha. Por suerte
ya estaba en casa, a pesar de todo. Ainhoa le estaba ayudando a ponerse el
pijama haciendo las veces de enfermera. No podía dejar de pensar en cómo había
llegado a esa situación.